ELO fue recogido de la calle en invierno de 2019 por un compañero y estuvo una temporada en casa de acogida hasta que tuvimos sitio para el en el Refugio Muskaria. Era extremadamente cariñoso y confiado por lo que se adaptó a la perfección a vivir dentro de casa.

Leo es un grandullón muy bueno y juguetón y mientras vivió aquí en el refugio se hizo compañero inseparable de LEO el sinvergüencilla naranja (ya adoptado).

Fue adoptado en noviembre del 2020 con 1 año aproximadamente de edad.